¿Podrá ser feminista la cooperación española?

Resumen

Este texto trata de explicar, desde mi experiencia como cooperante, los principales retos del sistema de la cooperación española para poder implementar una política de cooperación feminista, aprovechando la coyuntura de la anunciada reforma del sistema de cooperación internacional. Si bien el trabajo en igualdad de género es una de las señas de identidad de la cooperación española, su uso estético ha ido aumentando durante los últimos años, como en otros sectores, coincidiendo con que el feminismo se ha puesto de moda y la cooperación internacional ha perdido peso en la sociedad, en el mundo. A esto se unen varios problemas estructurales de la cooperación oficial que afectan a todo el sistema y llevan décadas siendo expuestos, sin concretarse reformas para su resolución. De ello depende el modelo de cooperación internacional para el desarrollo y la acción humanitaria por el que apuesta España. La desautorización del conocimiento experto, tanto en cooperación como en igualdad de género, están en la base de los desafíos a superar. Para implementar una cooperación feminista se requiere que el feminismo cale al interior de las organizaciones y que los y las cooperantes tengan mayor voz en el sistema de cooperación.